Leopard 2
El últimode un largo linaje.
El Leopard 2 es el último tanque alemán de un largo linaje, que comienza en 1918 con el A7V en el contexto de la Primera Guerra Mundial, creado como respuesta al tanque inglés Mark I, pero insuficiente en el combate e ineficiente ante las necesidades del terreno.
Debido al tratado de Versalles Alemania no avanzó públicamente en la innovación de nuevos tanques. Pero en 1934 con los nazis en el poder, Alemania hace público su primer tanque, el Panzer I, el cual tuvo su primera participación en septiembre de 1936 en la batalla de Toledo en la Guerra Civil Española, teniendo un éxito casi total y avanzando sobre las líneas enemigas, hasta que en octubre del mismo año se encontró frente a frente ante otro grande de la historia, el temido T-26 soviético quien inutilizó varias unidades del Panzer y dejando a los ingenieros alemanes con un gran desafío.

En 1936 se entregan los prototipos del Panzer III y Panzer IV, con mejoras en su blindaje y cañón, pero no fue hasta 1939 con la invasión a Polonia en donde se probó el éxito de estas máquinas y la consolidación de la industria de tanques alemana. Pero las batallas más intensas estuvieron en la toma de Paris, donde enfrentaron al temible Char B1 Bis Frances, que tenía una resistencia frontal única, pero su débil y lenta torreta, más su falta de maniobrabilidad hicieron una victoria segura por los flancos a los Panzer. En tanto en el frente oriental tuvieron éxito en las primeras campañas, pero con la aparición del ágil T-34, que superaba en blindaje, armas y potencia a los Panzer III y IV, sumado al extenso y hostil territorio Soviético, no tuvieron posibilidad de un avance sostenido, sumando bajas significativas.
Los problemas encontrados en el frente oriental obligaron a los alemanes a avanzar rápidamente con nuevas tecnologías, dotando al Panzer IV con un cañón más largo, capaz de penetrar el blindaje del T-34, logrando una producción de 8.500 unidades siendo el más numeroso de los tanques alemanes, pero con desventajas claras como su potencia, agilidad y falta de tecnologías en su blindaje. Por otra parte, con la aparición del rápido Panzer V capaz de neutralizar al T-34 cargó levemente la balanza hacia los alemanes, pero su poca confiabilidad mecánica y poca posibilidad de repararlo en el campo de batalla lo hizo vulnerable nuevamente.
En este mismo contexto pasaron sin mucha gloria los Tiger I y Tiger II que eran verdaderos acorazados con grandes cañones, pero con motores insuficientes para mover las pesadas estructuras. Quizás la línea Tiger más el Panzer V podían ganar batallas uno a uno frente a un T-34, pero la industria Soviética era capaz de fabricar 5 tanques por cada Panzer o Tiger, lo que hizo fracasar el intento de invasión alemana. Lo mismo pasó en el frente occidental con el Sherman estadounidense, el cual tuvo una producción de casi 50 mil unidades.

Los aliados lograron tomar Berlín y la Alemania Nazi tuvo que firmar su rendición, lo que hizo que no volviéramos a saber de tanques alemanes por varios años.
Con la polarización del mundo y la división de Alemania en el contexto de la Guerra Fría, la Alemania Occidental fue la encargada de crear un nuevo tanque para combatir a un viejo enemigo, nos referimos al T-54 y T-55, sucesores del T-34 que asechaban en la Alemania Oriental y superiores además a los tanques usados en ese entonces, el M47 Patton estadounidense.
En 1963 Alemania Occidental a través de Krauss-Maffei en conjunto con Porsche, desarrollaron un tanque superior en potencia y armas, además lo dotaron con tecnologías como estabilizador y visión nocturna desde sus primeras versiones. Este nuevo prototipo lo dotaron con un cañón inglés de 105 mm
preciso y efectivo contra blindajes, con un motor multi combustible capaz de funcionar con diésel, gasolina de alto octanaje, combustible de reactores y querosene. Sus 40 toneladas (ligeras para la época) en conjunto a su motor de 10 cilindros en “V” y 830 caballos de potencia lo hicieron un tanque ágil y maniobrable capaz de cazar y destruir a sus adversarios T-54 y T-55 sin que se dieran cuenta de su presencia, lo llamaron Standard Panzer, pero al ser aceptado para su producción masiva lo bautizaron como Leopard. Pero no todo era perfecto, el débil blindaje del Leopard lo hacía susceptible ante los cañones de sus contrapartes soviéticas.
Con la aparición del T-64 la OTAN necesitaba un tanque con mayores prestaciones y la Alemania Occidental en conjunto con EEUU, trabajaron en el proyecto MBT-70 pero las diferencias técnicas y costos lo llevaron al fracaso, por lo que Alemania decidió continuar con su proyecto Leopard.
Es así como en 1972 se entrega el primer prototipo de este nuevo tanque bautizado Leopard 2, tanque que en 1974 recibió nuevas mejoras, como un cañón de 120 mm acorde al contexto de la época y un motor diésel de 1500 caballos de potencia, que a pesar de sus 50 toneladas alcanzaba 70 kms/h, con una agilidad única. En los años siguientes recibió varias nuevas actualizaciones logrando vencer al Abraham estadounidense en ejercicios.
El Leopard 2 cuenta con más de 8 versiones y varias actualizaciones por versión, siendo la más importante la versión 2 A4, ya que ha sido exportada a 17 países de los 19 que lo operan. Esta versión de 1985 ya contaba con un blindaje mejorado de tercera
generación, control de tiro digital y municiones de penetración mejoradas, aparte de las tecnologías de sus predecesores. Algunos países como Chile han logrado actualizarlos de forma local, mejorando sus sistemas de tiro, blindaje, electrónica y estabilización, llegando al mismo nivel que la versión de 1995 el 2 A5.
La siguiente versión más relevante es la 2 A7, ya que con la experiencia de la guerra urbana en Afganistán, este presenta un blindaje modular intercambiable dependiendo del tipo de misión, con un refuerzo significativo en el chasis antiminas. Su armamento también mejoró con ametralladoras remotas para evitar emboscadas y un motor actualizado de 1.600 caballos de potencia.
Hoy en día se trabaja en el desarrollo del Leopard 2 A8 el cual

podrá ser integrado a las redes de las guerras electrónicas y armamento con capacidades de intercepción de misiles. Del motor todavía no sabemos, pero es muy probable que mantenga su configuración diésel V12 de 1500 caballos de potencia a 2.600 rpm (revoluciones altas para ser un motor de estas características) con un increíble torque de 4.700 NM, muy fácil de cambiar y reparar.
Son casi 20 países que lo operan, generando confianza y estabilidad en varias regiones del mundo como elemento disuasorio y a pesar de las varias bajas que a sufrido, se considera al Leopard 2 uno de los mejores tanques, ya que por su agilidad, versatilidad, tecnología y confiabilidad lo hacen una máquina necesaria en el campo de batalla, demostrando su historia y experiencia de más de 100 años.